viernes, 5 de febrero de 2010

The letter wich never was given...


... some december in the past



Donde Quiera Que Estés, Donde Quiera Que Te Encuentres


¿Qué tal preciosa, mi pequeña hermosa?


En este momento, tal ves, debes estar pensando que de nuevo soy yo, pues si, otra vez y por última vez soy ese mudo que se oculta detrás del poder de las palabras y del papel y pluma para expresar los pensamientos de mi terco corazón. Esos pensamientos, que me hacen desearte en este diciembre, como cada año, una Feliz Navidad acompañada de dulzura, calor y afecto de tus seres queridos, así como también para decirte y dejarte saber que no te he olvidado, que aprecio tu amistad y que guardo todos los recuerdos de lo que compartí contigo, recordarte que aunque la gente cambia y sus vidas se reorganizan, los amigos serán amigos por siempre, aunque no tengan nada en común, sólo compartir los mismos recuerdos; a veces vemos a nuestros amigos como algo seguro y no les dejamos saber que nos preocupamos por ellos y que los apreciamos, algunas veces estamos tan ocupados y tan involucrados en otras cosas que nos alejamos de nuestros amigos, no es que olvidemos a todas esas personas con las que has conocido nuevos lugares y has vivido increíbles aventuras, esas personas que en el momento en que lo necesitaste te ayudaron en tu trabajo, que comparten el almuerzo contigo, que te saludan amigablemente cuando te ven y que te envían chistes y mensajes, es sólo que descuidamos nuestra propia vida y al hacerlo descuidamos también a esas personas y su amistad.


Quiero que sepas que me da gusto haberte conocido y que, independientemente de las vueltas que de la vida, seguiremos siendo amigos…


Es asombroso la forma en que lo vivido puede parecernos extraño e incluso como puede desaparecer de la cabeza. Años enteros, con miles de vivencias, pueden perderse. A menudo veo niños que van a la escuela y yo pienso en mi propia época escolar, veo estudiantes de bachillerato y apenas recuerdo que yo también lo fui. Y así algún día en algún momento, ya sea en un paseo o en una noche insomne, apareció en mi memoria aquel hermoso recuerdo tuyo, aquel momento en el que me di cuenta que no pude olvidarte, cuando trate de engañarme a mi mismo diciendo que era algo pasajero, y cuando ya no pude pensar en nada más, en nadie más que no fueras tu.


Cada que te miraba mi respiración se agitaba y mi corazón comenzaba a latir más fuerte, mi vista se nublaba y mi voz se quebraba, ¿qué debía hacer para obtener una mirada tuya, una sin igual sonrisa?, ¿cómo podía ver que soltaras al viento un suspiro diciendo mi nombre, cuan difícil podía ser el acercarme a ti y decir todo lo que sentía, todo lo que veía y admiraba de ti?, ese sentimiento y admiración que te tenía y que es como si ya te conociera desde niña, con ese bello rostro, esa dulce sonrisa, esa tierna mirada, ese aroma y caricia de tu cabello, esa brisa de tu aliento; que podía hacer cuando lo único que me indicaba que estaba vivo, siempre que a tu lado me encontraba, era el correr de mi sangre a través de mi cuerpo, esa misma sangre que hervía y se volvía loca con un sólo rozar de tu piel, una sola vocal de tu pecho, un sólo movimiento de tu cuerpo, ese sutil movimiento que a cualquier hombre despierta, que a mi cuerpo en cera convertía y con el sólo brillar de tu ojos disolvía, ese mismo brillar que hacía que no pudiera dejar de admirarte, admirarte y orar por que un sólo día me dejaras palpar la suavidad de tu cuerpo, la dulzura de tus labios y perderme en el laberinto de tus brazos, como podía hacer para olvidar tanta dicha, tanta nobleza, tanta belleza, como podía hacer para no sentirme frente a ti tan insignificante, tan impotente, tan torpe, ¿cómo te podía olvidar?; ojalá pudiera hacerte sentir lo mismo para que te dieras cuenta de cómo te necesitaba, cómo suplicaba por una simple frase, una simple palabra tuya que hiciera calmar mi ansia de ti, esa ansia que hacía que me levantara a diario pensando en ti… pensando e imaginando tus ojos viendo lo míos, incluso sintiendo un hormigueo en mi cuerpo… Pensando y preguntándome ¿qué era mas fácil seguirte u olvidarte?…


Imaginé mi vida junto a ti, una vida llena de sorpresas, de ilusiones, de triunfos, pero la imaginación al igual que en instantes nos hace felices, también nos entristece cuando ponemos los pies sobre la tierra y nos damos cuenta de nuestra realidad, esa realidad donde no estabas tu, muchos decían que debía buscarte, otros que dejara pasar el tiempo y entonces sabría que hacer, pero ya en mi cuerpo no sentía más que una agonía y en mi boca un sabor persistente de lagrimas, la trova y hasta la plegaria, me daba vergüenza vivir de ese modo cobarde, no iba en tu busca ni conseguía tampoco olvidarte, alguna gente decía que mi amor no podía ser verdadero y no creíste en mi, yo que por tu amor te lo hubiera demostrado, te hubiera dado todas aquellas cosas que creíste no eran reales, el sol, la luna, las estrellas…


Si me hubieras seguido no te hubieras arrepentido de dejar la vida que tenias antes de conocerme, eras la primera en tener mi amor, estarías para siempre con migo, hasta el final de los tiempos, mírame a los ojos y veras que todo esto es cierto, todo esto es real…toda mi vida había hecho lo que había querido, lo que había querido lo había obtenido y cuando te encontré no pude ni siquiera tocarte mucho menos tenerte, quien eras tu para venir y arruinar mi vida, para hacerla tan insignificante, para hacerme perder todo lo que había logrado antes de conocerte, por qué cada vez que tenía la oportunidad de iniciar una nueva relación entrabas en mi mente y lo arruinabas todo, por qué no podía ser feliz con alguien más sin pensar en ti, tu fuiste mi perdición, mi salvación, mi agonía, ahora ya sin ti no puedo regresar de ese mundo al cual me llevaste justo en el momento de conocerte, ese momento que parece nunca acabar, cuando lo quieres pasa demasiado de prisa, cuando lo odias parece ser eterno, cuando lo amas sabes que no es cierto y cuando lo ves es sólo un sentimiento, llorando por ti estaba, solo, comiéndome y aguantando ese dolor, ¿Por qué no estabas allí?, ¡Te extrañe tanto!


Tu eras mi ruina, eras todo lo que quería en esta vida, esa vida que no tenía la culpa que yo estuviera llorando por ti, vivía atrapado en un laberinto donde tu recuerdo no perdonaba toda esa dicha de haberte conocido, a veces me preguntaba que pasaría, me desesperaba y me desahogaba por que tu eras ese gran problema que no sabía resolver, sin ti me estaba muriendo poco a poco por dentro, me estaba acabando, sabes que es verdad, sabes que todo esto es cierto.


Me siento tan culpable por no haber hecho nada por tenerte, sólo estaba esperando que ese sueño hiciera efecto, respirando el aroma de tu cuerpo y olvidándome de los vivos, mi piel se estaba quemando esperando tocar tu cuerpo, ese grito de dolor me estaba ahogando en este mundo tan injusto que permitió que te conociera, aún cuando sabia que no podría tenerte, estaba envenenado de ti, mi cerebro estaba ya casi muerto, día a día me deprimía al igual que los minutos de mi vida y cuando al fin despertaba de ese sueño, abría los ojos y no me sentía nada bien, una oscuridad profunda rodeaba todo mi ser, quería tocar mi cuerpo y nada podía hacer, ponía atención a todo y nada podía escuchar, quería levantarme y no podía mover los pies, quería mover las manos y nada podía hacer, las horas pasaban, el sudor mojaba mi piel, ¡mis ojos estaban tan abiertos!, no paraban de llorar, ¡me sentía desesperado! con ganas de gritar, todo por que al no estar junto a mi, cada cosa, cada día, parecía como si hubiera sido enterrado vivo, y aún cuando existiera otra vida no podía aceptar que todo acabara ahí…


Me sentía tan ausente, era un millón de cosas y ninguna que tu conocieras, quería despertarme en tu sol, quería despertarme en tu mundo sin dolor, pero sólo sufrí con la esperanza de morir algún día, cuando lo quieres pasa demasiado deprisa y cuando lo odias sabes que puedes sentir, quería dormir para no pensar, pero no podía, había cuchillo clavado en mi espalda desde que te conocía, eras como un puñal que no hiere ni lastima, lloraría contigo, mentiría contigo, incluso moriría contigo… tu eras aromática y yo era tan vacío, tu eras una súper muñeca Barbie y yo nunca iba a ser el adecuado para ti.


Abandone los prados y el campo cubiertos por una densa noche para encontrar lo que me faltaba, con el cerebro desconcertado en otro tiempo, en otro mundo, buscando la serena luz del día, buscando tu luz que cada noche era mi guía, ya no podía más, cada tono de música me recordaba el timbrar de tu voz, cada frase me hacía recordar tus palabras, únicamente pensaba y pensaba en ti, no sabía qué o cómo hacer para olvidarte, había intentado una y mil cosas y en cada una de ellas estabas tu, que me hiciste que sin ti no podía vivir, tiempo atrás me conformaba con sólo mirarte pero después nada era suficiente, necesitaba oír tu voz, necesitaba tu presencia junto a mí, quería olvidarte pero no podía y aún cuando lo hubiese logrado creo que jamás hubiera encontrado alguien más como tu.


Día a día me acercaba a ti con cualquier excusa sólo para tenerte cerca, evitar el hecho de verte me era imposible, dime por que reías, por que llorabas, cuando en lo más profundo de mi corazón estabas, cuando hablabas y murmurabas creabas un mundo donde aparecías como alguien sin igual, alguien con quien podía platicar, platicar y reír hasta morir, morir y renacer todo al mismo tiempo junto a ti, junto a ti siempre estaré, siempre que quieras a tu lado estaré, maldita la hora en que te vi y a la vez bendita la dulzura que te acompaña a diario en tu caminar; son sueños simplemente de un iluso incrédulo, ilusiones de un soñador, que me importa si lo que me hacías sentir no tiene precio, que me importa si verdad al fin podría ser ese sueño, aunque olvidarte quiera siempre vivirás en mi corazón y por muy lejos que me encuentre siempre habrá algo que haga que te recuerde.


Sin ti era igual que un niño que ha extraviado la mano de su madre y que busca desesperado el camino de vuelta casa con la esperanza de que algún día regrese, si bien un día mi vida fue un lecho de rosas, sin ti no era es más que un camino oscuro, frío y estrecho; cada luz, cada fuego, cada rosa de ese lecho te lo entregue y por eso era cuando mas necesitaba de ti; yo era el rió y tu el caudal que debía seguir, yo era el rió y tu la creciente, yo era tu siervo mi más preciada princesa; yo no buscaba la constancia de los amores, no pedía nada eterno a los mortales, solo a ti, mi artista de excelsos monumentos sepulcrales, mi artista que en mármol blanco tus estatus labras, dormías en mis labios cada que exhalaba una palabra y por estar en el lecho de tus brazos tan sólo un día, era capaz de dar la vida; cada día eras mi razón de ser, eras todo lo que tenía que hacer, sin ti no había nada más que ver, nada más que responder.


Cada que caminaba escuchaba pasos detrás de mi, escuchaba una canción y en esa canción no escuchaba más que tu cariño, ese cariño que te tenía y que era tan grande como los metros que tiene de profundo el mar; eras la sombra que a diario llevaba conmigo, la imagen del hechizo que más quería, bella ilusión por quien alegre moría, eras una dulce ficción por quien penosos vivía, nadie en jade, nadie en oro se convertirá, todos en este mundo quedarán, y ¡yo tenía tanto miedo!, ¡tanto pánico!, me asustaba pensar que todo ese amor que te tenía algún día se fuera contigo, como una pintura que se va borrando, como una flor que se va secando, al igual que el viento va soplando; mi vida era tan aburrida que yo prefería no vivir así, mi vida iba huyendo detrás de ti, siguiendo el camino que creaste, cortando las flores que sembraste en lo más profundo de mi corazón, las flores de ese jardín que poco a poco fuiste cultivando, ese jardín tenía sed y tu eras el agua, agua bendita que no me atrevía a beber, me olvide de mi vida para buscar la tuya, y ahora como vuelvo si me has dejado detrás de ti…


Cuando te conocí había una bruma en mi cerebro, las últimas cosas no parecían lo mismo, hacía cosas divertidas pero no sabía por que, perdóname si trate de darle un beso al cielo contigo, había una bruma a mi alrededor, no se si subía o bajaba, ¿soy feliz o desgraciado?, fuera lo que fuera, me habías embrujado, había una bruma en mis ojos, no sabía si era de día o de noche, y no sabía si había un mañana o un fin del mundo, pero si sabía quien eres tu: esa chica que me había enamorado…


A diario escuchaba susurrar al viento tu nombre seguido de una tranquilidad que parecía únicamente el palpitar de tu corazón, en una ilusión que tenía, donde aprisionaba tu pecho contra el mío, dicientote al oído cuanto deseaba estar contigo…


Sabes, mucha gente me preguntaba por que me gustabas, y yo no sabía que responder, no sabía que me gustaba de ti, y como no saberlo si eres tan única, tan bella, no se por que no podía responder esa pregunta, pero es que ¡eres tan diferente!, tienes una forma extraña de expresar tus sentimientos, no es que sea malo, por el contrario es lo que te distingue, al igual que a muchas personas se les distingue por otras cualidades; muchas veces te veía feliz con una expresión de satisfacción, con un reflejo en tus ojos, entonces me acercaba a ti y trataba de platicar contigo, pero esa felicidad estaba sólo en mi mente puesto que resultaba que estabas un poco molesta o de mal humor; otras veces parecías estar triste y era cuando mas feliz te encontrabas, tal vez es eso lo que me gustaba de ti, la forma de tratar con la gente, eres tímida pero atrevida, eres alegre pero seria, eres noble pero firme en tus decisiones, eres sencilla pero eres tan fina, eres graciosa pero educada, eres tan simple y eres la mujer mas complicada y hermosa que muchos como yo querían alcanzar.


Aún recuerdo cuando te vi por primera vez, me quede sin habla, eras la mujer más hermosa que había visto en mucho tiempo, ¡tu rostro se veía tan tierno!, tu figura era única, no había nadie más con ese cuerpo, eclipsabas todo lo demás, eras como una criatura exótica con una figura perfecta, todo tu cuerpo poseía un aspecto sano y agradable, tu cuello, tus hombros, brazos y manos eran armoniosos y simétricos y al mirarte a los ojos me quedaba prendido de ellos para siempre y cuando me mirabas fijamente, me dejabas aturdido, tu mirada era muy directa, unas veces penetrante y otras indiferente sin asomo de rubor y timidez, tus ojos adormilados eran un espectáculo distinto a cualquier atardecer, con más profundidad y sentimiento que siempre me hacían suspirar y al verte sonreír me llenaba de alegría y pasión sin control, tus labios parecían ser un tanto tímidos escondiendo detrás de si un paladar y una pasión asombrosa en cada beso. A diario te buscaba tan sólo para mirarte, tu pasabas a mi lado y ni siquiera te dabas cuenta que te veía, muchas veces trate de hablarte pero siempre me arrepentía, no se por qué o de que, pero tenía miedo, estaba desesperado, quería saber quien eras, quien era esa mujer que me hacía perder la cordura, que me ponía nervioso con su mirada, y me hacia temblar cada que pasaba a mi lado; cada que te miraba mi sonrisa era una maravilla, sonreía menos con los labios que con los ojos, todo mi rostro, la frente y mis mejillas resplandecían desde mi interior y reflejaban una compasión y un amor profundo.


Al fin un amigo resulto conocerte y me presento contigo, tu jugaste con mi nombre haciéndome bromas, resultó que no sólo eras bonita, también eras simpática; después de ese día te busque a diario tan sólo para decirte hola, para decirte adiós, más adelante tuvimos clase juntos y comenzamos a platicar un poco más, nos hicimos buenos amigos, hasta el momento en que te convertiste en mi mejor amiga, no hablabas mucho pero unas cuantas palabras bastaban para mi, dicen que un buen amigo es el que te ayuda siempre, que te hace cambiar, tu lo hiciste sin darte cuenta, cambiaste por completo mi vida, me hiciste conocer lo que era verdaderamente el querer y el cariño, por eso siempre te considere mi mejor amiga, me contabas todo lo que te sucedía, de tu familia, de la escuela, incluso de tu novio, pasaba el tiempo y sin darme cuenta necesitaba verte, cundo no lo hacía te extrañaba y cuando al fin te veía sólo decía tonterías, no tenía idea de que platicarte, apretaba los dientes y me decía a mi mismo “vamos dile algo, has que sonría”, pero cuando trataba de hablar mi mente estaba completamente en blanco, no hallaba un tema de que platicar, entonces simplemente te pedía que me contaras algo, pero únicamente me preguntabas por que era tan serio, yo no sabía que responderte, me moría de ganas de gritar que te quería, de abrazarte, de besarte, finalmente contestaba que así era yo, siempre te mentía diciendo que me gustaba hablar poco más sin embargo serio jamás lo he sido, reconozco que al inicio soy un poco serio pero cuando voy conociendo a la gente hablo como un loco, pero contigo era siempre diferente, era callado cuando con mis amigos no dejaba de hablar, incluso desde que te conocí asistí a todas mis clases, a diferencia de antes que siempre me ausentaba, no se por que estaba ahí, algo me motivaba, no se si quería ser mejor para ti o simplemente lo hacía para verte, así fue pasando día tras día, te comenzaba a extrañar más, pensaba a diario en ti y me preguntaba que estarías haciendo en ese momento, me desesperaba y te llamaba por teléfono, ¡quería decirte tantas cosas!; decirte todo lo que me sucedía, pero simplemente te preguntaba como estabas con el pretexto de la escuela, no quería colgar la bocina del teléfono, pero tampoco sabía que decirte, únicamente quería escucharte, escuchar tu voz, ¡pero jamás te diste cuenta!…


Cada que iniciaba un curso de clases, añoraba con estar en uno de ellos contigo para verte a diario, tu te acercabas a mi y me saludabas y una vez más no sabia que hacer, finalmente me decidí a hablar contigo, ese día fue el mas feliz y el mas triste, feliz por que al fin pude decirte que te quería, el más triste por la gran decepción que me lleve, me sentí el mas tonto, ¡el más estupido! por pensar que algún día podría llegar a tenerte junto a mí, después de eso ya no podía mirarte a los ojos de la misma manera, pero aún con todo esto no me rendí, seguí siendo el mismo tonto ¡el mismo estupido! que creía que podía conquistarte, conquistar a mi mejor amiga, tu me pediste que siguiéramos siendo amigos y yo te pedí que nada cambiara entre nosotros, que todo siguiera igual que antes, una vez más me equivoque, nada volvió a ser como antes, me evitabas o me decías que tenias que ir a clase, ya no me platicabas de ti, ni siquiera de tu novio, aquel del que decías estar orgullosa, no sabes como siento admiración por él y a la vez una rabia profunda; admiración por haber logrado que lo quisieras y rabia por no apreciar lo que tiene, y esto lo se por todo lo que me dijiste de él, como te ignoraba, las atenciones con tu familia, sus buenos deseos, pero siempre para él solo, jamás para ti, me hablabas de él como si fuera tu adoración, pero siempre llegabas al mismo punto: no te ponía atención, te ignoraba, te trataba mal… y así muchas veces yo sólo me tragaba mi orgullo y mi cariño por ti aconsejándote, cuando me moría de ganas de decirte que lo botaras que alguien como tú no necesitaba de alguien como él, tampoco de alguien como yo, eso lo he entendido al fin, aunque me duele pero finalmente me he rendido, no he dejado de quererte pero ya me canse de engañarme a mi mismo soñando con una vida que jamás tendré junto a ti.


Los últimos días que te vi, aunque pocos, para mi han sido suficientes, incluso me aleje de ti, te evite, no por que no quiera hablarte, lo que sucede es que trato de olvidarte, trato de evitar todo lo que haga que te recuerde, aunque parece ser inútil todo lo que hago por sacarte de mi cabeza, hay veces que no quiero ni mirarte para no hacerme ilusiones con tus ojos, no quiero acercarme para no soñar con tu cuerpo y a veces no quisiera hablarte o saludarte por que lo poco que logro sacarte de mi cabeza en mucho tiempo sin verte tu lo devuelves con un simple hola, un simple adiós, y me vuelvo a poner mal, me enfermo de ti; hay veces que te veo triste pero no quiero acercarme, no por ser una mala persona, pero se que si lo hago ya no podré alejarme, deja de darme esperanzas, se egoísta con migo, se indiferente, has que pueda odiarte por que jamás de ti podré olvidarme.


Creo que cada día me parecías más hermosa, sabía que tenía que irme y quizá no te volvería a ver, pero aún así no me hacía a la idea de cómo pudieran ser los días sin verte, habían habido días en los que no te veía pero esta vez sería diferente, ya no podría verte más, no podría estar cerca de ti más, no podía imaginar los días y cada uno de estos sin verte, aunque podría llamarte por teléfono lo necesitaría hacer a diario, tu eras lo único que deseaba aquí, pero si jamás iba a tenerte junto a mi, no tenía más que hacer aquí; al fin he tomado una decisión, ahora sin importar nada me alejare de ti, hoy me voy con la frente en alto, la mirada al suelo y el corazón destrozado, la frente en alto por todo lo que logre ser y hacer durante el tiempo que estuve aquí, la mirada al suelo por que no quiero que vean que me voy llorando y el corazón destrozado por que nunca pude llegar al tuyo.


No quiero hacer que sientas algo con todo esto, tampoco lo hago para desahogarme, simplemente no quiero dejarte sin decir todo lo que sentí, todo lo que no pude demostrarte en todo el tiempo de conocerte, así que no pienses que esto lo he inventado solamente para impresionarte, tampoco lo he copiado de algún poeta famoso, sólo es un modo extraño de explicar lo que me hiciste sentir, lo que antes no me habían hecho sentir; ¡tanto amor y a la vez tanto dolor!, se siente una alegría inmensa en todo el cuerpo, tus músculos reciben espasmos de calor, pasa un escalofrío desde los pies hasta la cabeza, la voz se quiebra, las lagrimas brotan sin poder evitarlo, los maxilares se cierran aprisionando los dientes dejando salir sólo un pujido de dolor y el estomago se contrae revolviendo todo por dentro, las manos tiemblan y se enfrían en el día mas caluroso, se forma un nudo en la garganta y tus oídos ensordecen con un zumbido, es como estar en lo profundo del mar, tan frío, oscuro, calido y con una presión en el pecho que hace soltar suspiros sin control, el sueño se ausenta de la mente sin poder conciliarlo y la depresión te invade provocando días tan largos que parecen ser eternos.


Todos y cada uno de mis días pensaba en ti, me sentaba frente a un libro y escuchaba música mientras entre líneas trataba de comprender lo que leía, aunque me era imposible proseguir sin ser interrumpido por tu recuerdo, la tristeza me superaba y desidia mejor escribir mis propios pensamientos que leer los de algún desconocido poeta, y es así como hoy he escrito esto para ti, no se si tenga sentido, no se si debas leerlo o no se cuan equivocado este pero así fue tu recuerdo, tan dulce, tan hermoso, tan deprimente, me dabas fuerzas para seguir adelante y me las quitabas repentinamente, me dabas alas para volar tan alto que me segaba la distancia de la realidad, un día tras otro era el mismo comenzar y el mismo terminar, despertaba pensando y dormía soñando en ti, suspiraba con cada recuerdo y sonreía con cada imagen tuya.


Ahora estoy confundido, no me duele este amor, este cariño que te tuve, me duele el hueco que dejo ese sentimiento, esa sensación y dulzura, me duele el no haber podido disfrutar y compartir todo eso y creo que ahora eso se fue, sigue doliendo pero ya se fue, cuando estoy contigo, aun siento ese hueco y vacío y creo que lo que verdaderamente extraño es ese sentimiento, esa melancolía que cada noche despierto me mantenía, buscando la forma de sacarlo de mi pecho, y ahora que ya no esta lo extraño más que nunca y créeme que nada deseo más que regrese ese amor y cariño para poderte extrañar a ti también, no digo que no lo hago ahora, pero es diferente, ya no me quema tu dulzura en mi cuerpo siempre que contigo me encuentro, ya no suspiro de la misma forma como lo hacía cuando te conocí, tu lejanía, tu indiferencia y hasta tu propia grandeza hicieron que olvidara todo eso, por días y días enteros yo deseba que se fuera para no sufrir más y cuando al fin se ha marchado, lo necesito más que nunca, ahora me sonríes y ya no puedo reír, me hablas y ya no puedo suspirar, no se si ahora me quieres, pero ya no puedo llorar, todo se fue, era tan hermoso, pero se fue, día a día te quise, semana a semana te extrañe, mes con mes te espere y año con año te ame, pero todo eso se fue, cometí un error y me enamore de un imposible y pague un precio muy alto, me aferre a ese imposible y me hice mucho daño, pensé que algún día lo lograría, pero me fui sin decir nada, ahora regreso para desearte lo mejor, ya no se si te amo pero aun te quiero, y por eso soy sincero contigo, por que fuiste lo que mas quise, y por eso mismo te lo digo ahora ya que no pude hacerlo en ese entonces.


Se que pude haber hecho más por tenerte y ahora me arrepiento, pero también me doy cuenta que mi cariño y amor no tenían nada de especial y no constituían ningún dolor excepcional, que todo ser humano alguna vez sufre lo mismo y aprendí a ver que el destino más inexorable no es la fuerza suprema ni lo definitivo, sino que los seres humanos débiles, llenos de temor y abatidos pueden superar y vencerlo todo.


Por todo lo anterior y muchas cosas más hoy te digo adiós deseándote que seas muy feliz y encuentres alguien que de verdad te merezca, que te valore y sobre todo valórate a ti misma, no quiero hacer que cambies pero si quiero que te des cuenta de la gran persona que eres y vales, no temas ha estar sola por que si lo haces creerás que siempre necesitaras de alguien, aunque no te quiera y aprecie, pero te aseguro que si confías en ti misma y crees lo que verdaderamente eres no habrá necesidad de sufrir y te darás cuenta de todas las personas que de verdad te aprecian, hay ocasiones en que la gente piensa como será el futuro, imagina como vivirá dentro de diez años y con forme pasa el tiempo empiezan a darse cuenta si verdaderamente podrá lograr lo que se ha planteado alcanzar en ese tiempo, la vida comienza a poner obstáculos, lo que ocasiona que se creen nuevas dudas respecto a su vida, no sabe si seguir adelante o si simplemente dejar que todo suceda; algunos por el contrario luchan sin importar contra que o quien para alcanzar sus objetivos y hoy yo te invito a que te unas a esa gente, lucha con todas tus fuerzas por lograr lo que deseas, no dejes que nada ni nadie te detenga, por muy difícil que parezca, sólo la muerte es un imposible…


Es una lastima que todo lo que lees no sean más que simples bellos recuerdos plasmados en un papel con letras mudas, sin conciencia ni sentimientos, sin poder hacerte sentir la alegría que tuve al crear cada pensamiento, mas sin embargo se feliz día a día y que alcances todos tus sueños, llegues a todas tus metas y tengas mucho éxito en tu vida…


1 comentario:

Anónimo dijo...

es lo mas bonito sincero y triste a la vez q he leido en mi vida, gracias por publicarlo haces q abra los ojos a muchas cosas, gracias por estar ahi, gracias por existir y gracias por ser mi amigo.